Sigrid Ferrer Mendoza [Barranquilla (Colombia), 1976]. Maestra en Artes plásticas por la Universidad del Atlántico (2005). Máster en Investigación en arte y creación por la Universidad Complutense de Madrid (2014). Doctora en Artes por la Universidad Complutense de Madrid (2021). Artivista, curadora, historiadora e investigadora de arte. Arte desde el compromiso ético. Postcolonialismo. Migración. Compromiso. Diversidad. Mestizaje. Africanismo. Indigenismo. Otroriedad.
PAC- Desde 2013 te proyectas desde Madrid. ¿Te hubiera gustado seguir haciéndolo desde tus raíces?
Sigrid Ferrer Mendoza – Siento que estar aquí en Madrid-España me ha permitido tener una distancia física y emocional que me ha servido para “mirar” objetivamente la situación social de mi país de origen.
PAC – ¿Crees que tu trayectoria habría sido la misma?
Sigrid Ferrer Mendoza – No sabría responder si mi trayectoria sería la misma o no. Lo que sí puedo decir, es que he aprovechado el ámbito educativo para cimentar mi investigación artística y conformar mejores obras desde esta nueva perspectiva que me provee un distanciamiento, siendo menos reactiva y más reflexiva respecto de la situación general del país.
PAC – ¿Qué te impulsa a dedicarte a la práctica artística?
Sigrid Ferrer Mendoza – El arte es el medio que encontré para expresarme. Me impulsa el deseo creativo de expresarme por medio de imágenes con un carácter social que genere una reflexión.
PAC – ¿Qué ansiabas?
Sigrid Ferrer Mendoza – Ansiaba formarme en niveles superiores como lo he hecho. Ansío seguir realizando obras de arte que mantengan esta línea investigativa de obras con carácter político y social. Ansío un cambio en mi país.
PAC – ¿Lo encontraste?
Sigrid Ferrer Mendoza – Llevo ocho años en este país. Sigo en el camino, luchando para tener espacio dentro del arte madrileño. Creo que el tipo de obra que realizo no es “apreciada” en este ámbito, ya que no se abren espacios donde se muestre el arte con implicaciones sociales.
PAC – Defínete mediante hashtags.
Sigrid Ferrer Mendoza – #artivistaenresistencia
PAC – Háblanos un poco, brevemente, de tu trayectoria.
Sigrid Ferrer Mendoza – Por fortuna, desde el 2004, antes de terminar la carrera profesional, inicie mi trayectoria artística con obras que mantenían el carácter social producto de la violencia política y que mantengo hasta el momento. Trabajé en un grupo artístico llamado “Indocumentado” participando con un cierto reconocimiento a nivel artístico en convocatorias nacionales. En Colombia conformé grupos que generaban espacios expositivos alternativos que permitieran a artistas emergentes poder mostrar sus trabajos lejos de imposiciones de galerías. Participé de varios proyectos en grupos de investigación en Colombia. Fui miembro activa de la Red de Mujeres Artistas del Caribe (REDHADA). Pertenezco al grupo de investigación y cultura Yo Soy el otro. Me he desarrollado como docente en el área de las artes visuales en las Universidades del Atlántico y Central del Ecuador, e institutos de educación en mi país de origen, y en Madrid, así como mediadora de museos y de salones de arte. Desde que llegue a España estoy un poco desconectada del sistema artístico aunque sigo realizando obras e investigaciones para Colombia. Soy productora de imágenes y textos con valor crítico y ético con valor social, me especializo en la creación de ideas e imágenes, escritura de textos académicos, la investigación académica y la docencia universitaria. Mis intereses de investigación están relacionados con el conflicto armado en Colombia, sus víctimas y los procesos creativos como apoyo a la problemática consecuencia de este conflicto social.
PAC – ¿Cuáles son los temas de tu trabajo artístico?
Sigrid Ferrer Mendoza – Soy, como la mayoría de las personas de los países que conforman América del Sur, una combinación de etnias y culturas (Afro – Indígena – Otro). Mi línea artística, siempre ha sido el de realizar obras que mantengan una postura frente a la violencia política ejercida por el aparato político.
Teniendo en cuenta lo anterior, las obras de arte que he realizado a lo largo de mi carrera aborda los temas sociales, con implicaciones de violencia política, producto además de una parte vivencial y emocional. Un interés que nace durante mi periodo universitario por crear obras que tuviesen implicación social.
Es importante para mi esta relación, ya que el arte que se ejerce bajo estos contextos de violencia política, “funciona” como informante y denunciante en situaciones de conflictos. En términos sencillos, sería como un “químico revelador de fotografía”, un desvelador crítico, un instrumento que permite ver, pero no de forma directa. Pero en esta función de “revelador”, el arte no pretende concederse a sí mismo una categoría “superior”: es solo una “herramienta / medio” que usan los artistas para narrar su historia y la de otros. Esos miles de ojos contando sus realidades conforman el relato de las sociedades.
El arte es una expresión de la sociedad, cuyo deber ético, frente a los actos de barbarie y violencia, es dar respuestas a los diferentes acontecimientos que le acompañan. Relacionado a este concepto, el arte es un nuevo mecanismo de memoria, cuyo destello arroja pistas para comprender el estado de una sociedad, teniendo cuidado a las diferentes imposiciones desde el discurso oficial para no reducir el acontecimiento histórico a la simplificación del frío cemento, mármol, hierro o bronce. Los monumentos deben ser manifestaciones vivas que generen una memoria colectiva, para mantener la perdurabilidad en el tiempo, que impida su repetición.
Bajo estos lineamientos se ha constituido mi obra e investigación, propiciando diálogos que recojan la realización, construcción de espacios que alberguen este tipo de expresiones realizadas por otros artistas con estas implicaciones.
En este ejercicio del desarrollo del pensamiento que constituye la base de la exploración, en la que para mi funciona como un mantra. Creo en el poder del arte como agente transformador, como voz de la sociedad. Creo en la capacidad de hacer sentir. Creo en el arte como posibilidad de cambiar las cosas, como medio para cuestionar al otro, para invitar al espectador a confrontar su memoria y la de la sociedad. Creo que todos debemos ser sujetos políticos y que ser artista conlleva también ese llamado y ese compromiso.
PAC – En tu opinión, ¿cuáles son los asuntos más preocupantes o indignantes de lo que sucede actualmente en el plano político y social en Colombia?
Sigrid Ferrer Mendoza – Pues hay muchos asuntos que me preocupan, pero el principal, lo que más me preocupa en este momento, es que en Colombia están matando a los muchachos que protestan en su derecho legítimo, van apareciendo uno a uno restos de cuerpos en ríos y campos baldíos de los 111 jóvenes desaparecidos hasta el momento, además de los más de dos mil heridos y lesionados oculares bajo este marco de protesta desde el 28 de abril, ver como los medios nacionales españoles no se hacen eco de esta situación en contraste con la situación de Cuba y Venezuela. A partir de ahí, me preocupan muchas otras cosas, como la violación constante de los derechos fundamentales que se le vulneran a los colombianos, la corrupción, el asesinato constante de lideres sociales que defienden el territorio para evitar la explotación minera y de otros recursos naturales, el narco estado traducido por sus mismos integrantes como “tragedias familiares”, donde la mayoría de los gobernantes tiene un familiar preso o involucrado con un hecho relacionado con el narcotráfico.
PAC – Como mujer, migrante y artista, ¿Cómo ves España, desde el punto de vista del arte, con respecto de Colombia?
Sigrid Ferrer Mendoza – Bueno, es evidente que aquí en España hay mayor apoyo a la cultura, pero también veo que hay muy pocas obras que representen la realidad nacional de España. Noto también la escasa representación de artistas migrantes residentes en este país.
PAC – Cómo artivista, ¿qué pretenden tus trabajos: despertar a la gente de su letargo o del desconocimiento, cuestionar, incomodar, hacer pensar o sólo reaccionar?
Sigrid Ferrer Mendoza – Bueno, pretendo hacer todos los anteriores cuestionamientos, además de recopilar y pretender ser parte de la menoría díscola del archivo social.
PAC – ¿Qué importancia da al mercado una artista como tú?
Sigrid Ferrer Mendoza – Diría rotundamente que poca o nada. No hay espacios que promuevan el arte de artistas migrantes, desde que estoy aquí en España, he expuesto dos veces, una en la muestra de fin de máster de la Universidad Complutense y otra en Luminaria Usera. Las demás muestras las he realizado en mi país, enviando mi propuesta, y contando con amigos colaboradores que me ayudan a materializarlas allí. El tipo de obra que realizo esta destinado a espacios alternativos de la diáspora latinoamericana en Madrid.
PAC – ¿Algún proyecto, pendiente, que te gustaría realizar?
Sigrid Ferrer Mendoza – Tengo varios proyectos. Unos para presentar en Colombia. Otro que realizare aquí, en la ciudad de Barcelona, el día 16 de julio, con una intervención titulada Trenzando identidades, bajo el marco de las movilizaciones de Colombia. Tengo otras propuestas de intervención que se refieren a la migración, tema que me toca muy de cerca.
PAC – Un deseo.
Sigrid Ferrer Mendoza – Quiero seguir haciendo arte político, comprometido con mi realidad, con mi historia. Arte, de ese que hablaba Walter Benjamín en su descripción de la pintura de Paul Klee “Angelus Novus”, de 1920: “Se ve en él a un ángel al parecer en el momento de alejarse de algo sobre lo cual clava su mirada. Tiene los ojos desencajados, la boca abierta y las alas tendidas. El Ángel de la historia debe tener ese aspecto. Su cara está vuelta hacia el pasado. En lo que para nosotros aparece como una cadena de acontecimientos, él ve una catástrofe única, que acumula sin cesar ruina sobre ruina y se las arroja a sus pies. El ángel quisiera detenerse, despertar a los muertos y recomponer lo despedazado. Pero una tormenta desciende del paraíso y se arremolina en sus alas y es tan fuerte que el ángel no puede plegarlas… Esta tempestad lo arrastra irresistiblemente hacia el futuro, al cual vuelve la espalda mientras el cúmulo de ruinas sube ante él hacia el cielo”
Creo que es importante desde todos los espacios comunicar, visibilizar las realidades y las opresiones en las sociedades y las sociedades oprimidas, en este sentido como artista, decido por medio del arte, ser parte de este grupo de personas y profesiones que ponen a disposición comunicar, incomodar, evidenciar y visibilizar estas realidades.
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