El artista y fotógrafo peruano-chileno revoluciona la capital mundial del entretenimiento con su más reciente exhibición: “I AM MY FAMILY”. En ella, el autor logra integrarse en la piel de sus antepasados a través de la interpretación y performance.
«I AM MY FAMILY», Christian Fuchs, 2022.
“Yo creo que ellos están contentos de ser recordados”, reflexiona Christian Fuchs respecto al trabajo creativo de representar a miembros de su familia. De hecho, la muestra “I AM MY FAMILY” que abrió en Los Ángeles (California, EE.UU) el pasado 7 de mayo, contempla 16 retratos fotográficos en los que él mismo recrea a diferentes ancestros. Allí habla de conexión; de un vínculo que es tan parte de él como su propia identidad y que gracias al ejercicio artístico ha logrado afinar y reconocer.
No es difícil confundir las fotografías de Fuchs con pinturas, en gran parte debido a su naturaleza pictórica y la autenticidad con que recrea aquellas imágenes protagonizadas por tatarabuelos y demases. El cuerpo y la piel del artista sirve como su propio lienzo sobre el cual extiende cada obra, con una versatilidad que no conoce límites etarios ni de género.
“En mi casa siempre hablaban de los muertos como si estuvieran vivos”, rememora Christian. A esa particularidad identifica como la posible semilla que terminó por germinar en su fascinación y estrecha cercanía con familiares que nunca conoció personalmente, pero siente presentes constantemente. Anécdotas, historias, recuerdos, Fuchs ha logrado llevar la frase “solo muere quien se olvida” a otro nivel mediante su creatividad y trabajo con la fotografía.
«I AM MY FAMILY», Christian Fuchs, 2022.
El proceso detrás de cada interpretación conlleva una preparación psíquica, intelectual, emocional y física. El artista realmente se sumerge en la vida de cada personaje a quien representa; lee sus cartas, desarrolla sus pasatiempos, come sus platos favoritos, y más. Una fórmula que perfectamente podría entenderse como una extensión del sistema Stanislavski y la actuación del método si no fuera porque el autor no lo considera actuación; en definitiva, para Fuchs no se trata de teatro, sino de realidad.
Un caso especialmente difícil fue el trabajo que requirió transformarse en el patriarca de la familia, el tatara tatara abuelo de Christian, Carl Schilling. Para ello, el artista debió dejar crecer su barba por más de un año y teñirla de color blanco una vez alcanzado el largo indicado. Sin embargo, la mayor complicación llegó luego, con una severa reacción alérgica ocasionada por la tintura. A modo de anécdota, Fuchs cuenta que dio por concluido el proceso de metamorfosis cuando en un banco le consultaron si deseaba unirse a la fila especial para la tercera edad.
«I AM MY FAMILY», Christian Fuchs, 2022.
En cuanto a la recepción que ha tenido “I AM MY FAMILY” dentro del público estadounidense, el fotógrafo destaca su curiosidad e interés. “Ha venido gente muy importante de la escena de acá, como actores y artistas visuales de mucho peso; pero también están los transeúntes que pasan siempre y me encanta conversar con ellos y explicarles todo acerca de la obra”, comenta. Una situación diferente a la que ocurre por lo general en sus natales Chile o Perú, donde el mismo artista reconoce que ha tomado más esfuerzo generar una conexión y entendimiento entre las audiencias y su trabajo. “Nadie es profeta en su propia tierra” y Christian Fuchs coincide con ese refrán. De todos modos, su relación con estos países no se siente como una tarea pendiente para el autor, quien valora sus vínculos familiares y raíces más allá de los territorios. “Tengo una bonita relación con Chile independientemente de cómo reciban mi arte”, confiesa.
Otro personaje destacado dentro del catálogo de Fuchs, es su tía tatarabuela, Dorothea Viehmann, nacida en Alemania el año 1755. Hija de un posadero, llegó a conocer a los Hermanos Grimm para luego convertirse en musa de varios de sus clásicos cuentos.
«I AM MY FAMILY», Christian Fuchs, 2022.
“Todos en nuestra vida diaria manifestamos a nuestros ancestros a través de actos cotidianos, simplemente sin darnos cuenta”, explica el artista. Él mismo sostiene que su obra artística es solo una profundización de aquella inherente conexión humana con quienes forman parte del mismo árbol genealógico, independiente del parentesco y generación. “Solo lo llevo a otro nivel, a uno más consciente”, reflexiona.
La muestra “I AM MY FAMILY” está disponible actualmente en Yiwei Gallery (1350 Abbot Kinney Blvd, Venice, CA 90291); Los Ángeles, California; hasta el 19 de junio.