Sobre la obra
En «El misterio del capitalismo», el artista utiliza una caja de cartón aquellas que se usan para transportar bienes producidos en masa como soporte de una distópica escena devocional. De espaldas al espectador y de rodillas, una familia compuesta por dos adultos y dos niños reza ante un falso Sol, que es en realidad un agujero calado en el cartón. Sus cuerpos, enfundados en las camperas y zapatillas de moda, se superponen a los logos de la industria automotriz originalmente impresos en la caja. Al proponer la adoración a un ídolo ausente, el artista confronta al espectador con una imagen apocalíptica que funciona como augurio de un futuro no distante de exasperante alienación.
Sobre el artista